Domingo 25

SEÑOR DIOS, al comenzar esta reunión queremos que estés presente en nuestra vida. Que las tareas que realicemos tengan un sentido solidario y no sean sólo para beneficio nuestro, sino para que podamos servir a los demás con un espíritu nuevo. Te lo pedimos por Cristo nuestro Señor.

Todos: Amén.

Desde que nos pusimos en contacto con Jesús, el Salvador, varias veces hemos caído en la cuenta de que Él nos llama y hemos querido seguirlo. Seguirlo es comprometernos en su causa y su causa es la de hacer de nuestro mundo una sociedad en fraternidad, en dignidad, en alegría e inmensa confianza en Dios

Hoy vamos expresamente a reflexionar y a orar sobre la respuesta seria, responsable y generosa a su llamado.


Lectura de San Marcos 1,9-11. Aquí el evangelista sinóptico relata el bautismo de Jesús. 


REFLEXIÓN. ¿Qué fue lo que realmente nos pasó en nuestro bautismo? ¿Cuál debería haber sido el resultado? ¿Qué tendríamos que hacer para vivir de acuerdo con el bautismo que recibimos? ¿Qué significa vivir como un bautizado?

(Acá se le otorga la palabra a cada uno de los integrantes).


PADRE NUESTRO

Guía: Unidos en una sola voz digamos: Padre Nuestro...

CONCLUSION


Guía: Ven, Señor, haz resplandecer tu rostro sobre nosotros. Todos: Y seremos salvos. Amén.